¿Somos el seguro de vida de las manos ortopédicas o no?

¿Cuántos de vosotros os crujís los dedos?
Aunque no creo que nadie haya sido tan estúpido y haya estado tan aburrido como para hacer una encuesta sobre ello, podría decir sin margen de error que más del 60% de la población practica esta estimulante experiencia periódicamente. Y sin ninguna duda, todos sin excepción hemos oído ese gratificante sonido crujiente, aunque sea ajeno, o nuestro pero sin intención propia de producirlo.
A los que no lo hayan probado, seguramente por grima o por miedo al dolor, decir que al principio jode un poquillo, pero luego hace que te relajes y todo. Aunque bueno, el que no quiera, que haga otras cosas tan típicas como morderse las uñas, intentar sacarse los restos de carne de entre los dientes con la lengua o hacerse ricitos con un pequeño mechón de pelo. También se puede optar por Dejarse las Fosas Nasales Realmente Limpias, pero en público puede causar algún que otro shock.
Bueno, me estoy desviando del tema.
Lo cierto es que nunca he sabido muy bien por qué los dedos crujen. A lo mejor tenía artrosis o algo de eso, pero nunca me preocupé demasiado, mientras pudiera coger un mando de play o escribir de forma medianamente legible. Algunos me dijeron que era por una cosa, otros por otra, y la verdad, no sabía a quién creer. Menciono una de las explicaciones, que también es cierta, pero a la que le falta algo respecto a la verdadera: el nombre que recibe esa acción es “saltarse los tendones”, y el chasquido es un golpe seco que produce uno de ellos contra el hueso al cambiar bruscamente de posición.

Pues bien, en toda articulación hay una pequeña bolsa llamada cápsula sinovial, rellena del líquido homónimo y varios gases (CO2, N2, 02), cuya función es lubricar las articulaciones. Cuando nos crujimos los dedos, esta cápsula aumenta su volumen (ya que también aumenta el espacio de las articulaciones), y algunos de esos gases salen de la bolsa en forma de burbujas. Cuando vuelve a su posición, las burbujas explotan provocando ese sonido tan característico, a lo que ayudan los tendones y ligamentos de alrededor.

Aunque hay pocos estudios, algunos dicen que es malo hacerlo, y otros que no pasa absolutamente nada. Así que lo mejor sería que lo hagamos no muy a menudo, por si acaso no hay manos ortopédicas en condiciones cuando se nos quede inutilizada y nos la tengan que amputar… xD

Bueno, intentaré actualizar más a menudo, aunque sea con chorradas de estas, aunque de vez en cuando vea algo más interesante que esto... Que tengo esto muy abandonado jeje...

¡Un saludo a todos!

P.D.: Gracias a todos aquellos que se han molestado en firmar, la verdad es que se agradece bastante...